A fin de alinearnos con los principios que guían la transición desde la Sociedad Basada en el Ego y el Dinero (SBED) hacia la Sociedad Basada en el Ser y los Recursos (SBSR), es esencial contar con criterios para interpretar los acontecimientos que están sucediendo en el entorno local y global.

Este enfoque nos permite discernir si las noticias, decisiones o iniciativas que presenciamos o de las que tenemos conocimiento, contribuyen a la evolución de nuestra sociedad o solo perpetúan las estructuras decadentes, que ya no nos sirven.

Veamos algunos ejemplos concretos positivos:

• Cuando un gobierno reduce la cantidad de senadores, diputados, ayuntamientos o asesores y personal superfluo —sin desmejorar la atención al ciudadano— o elimina leyes que lo que hacen es restringir la libertad individual, está debilitando estructuras jerárquicas obsoletas y despejando el camino hacia modelos de autoorganización social más libres, participativos y eficientes.
• Cuando un grupo de personas decide dejar la ciudad para irse a vivir al campo y reconectar con la naturaleza desde un nivel de consciencia más elevado, practicar la permacultura, construir viviendas sostenibles, gestionar responsablemente la energía y reciclar sus residuos, está dando fuerza al rol del “prosumidor” (quien produce gran parte de lo que consume) y se encamina hacia la autonomía socioeconómica.
• Cuando proyectos urbanísticos y residenciales promueven el cohousing y las tiny houses en entornos naturales, junto a espacios comunes donde se comparten actividades y tareas cotidianas, se están sentando las bases para desarrollos más integrales como las Villas NatTec©: comunidades conscientes, colaborativas y sostenibles, que buscan “refundar la vida y repoblar la Tierra” desde una nueva ética del habitar y el convivir.
• Cuando hombres y mujeres crean espacios para meditar, dialogar sobre el crecimiento espiritual o compartir inquietudes trascendentes, sin rituales, invocaciones ni figuras de autoridad —pero en un marco de profundo respeto por la diversidad de creencias— están encarnando los principios de los Círculos Dorados del Ambroz: espacios de encuentro libre y horizontal, que promueven la evolución interior y la autonomía espiritual.
• Cuando alguien da su palabra, registra el compromiso adquirido, entiende debidamente las condiciones en que debe realizarse y se asegura de cumplirlo en tiempo y forma, está cultivando la capacidad de cumplimiento cabal: un valor fundamental para construir relaciones sólidas y comunidades fiables en la nueva sociedad.

Millones de personas, en todos los rincones del planeta, están gestando con sus elecciones y acciones diarias una nueva forma de vida: la SBSR. Cada uno está aportando su pieza a este gran puzzle o rompecabezas colectivo, que poco a poco revela la imagen de un “nuevo mundo en una nueva Tierra”.

Reconocer cómo encaja cada pieza en este cuadro mayor —pintado por manos y corazones despiertos— da sentido a los esfuerzos individuales y genera sinergias transformadoras.

Contar con criterios claros para evaluar las iniciativas que observamos en nuestro entorno nos permite adoptar una visión más amplia, global y futurista… y comprender que la transformación no solo es posible: ya está en marcha.

Libro Cómo llevar la luz al poder, en nuestra vida y en el sistema

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